Situada junto a la Basílica de San Marcos se encuentra la torre más alta de Venecia, el campanario de San Marcos. Esta sencilla estructura de ladrillo rojo mide 98 metros (323 ft) de altura y está coronada por una figura de oro del Arcángel Gabriel. Desde lo alto puedes disfrutar la fantástica vista de la ciudad.
La construcción de la estructura original comenzó en el siglo IX y se completó varios siglos después. En 1902, la torre se derrumbó y la que hoy está de pie data de 1912.
Pasa unos minutos observando la logetta, es decir, la pequeña construcción en la base de la torre. El edificio original data del siglo XVI sin embargo también se destruyó cuando la torre se desplomó. Lo que se ve hoy en día es una reconstrucción de principios del siglo XX. Admira los bajorrelieves y las estatuas de dioses romanos, como Apolo y Minerva.
Después, sube a lo alto del campanario para disfrutar la vista de la ciudad y las islas cercanas. Mira por encima de los tejados rojos y las iglesias antiguas. Trata de elegir un día con cielo despejado para lograr ver las Dolomitas. La vista es especialmente impresionante durante el invierno y la primavera, cuando la cima de las montañas está cubierta de nieve.
Después de admirar la impresionante vista, voltea a ver las famosas cinco campanas de la torre, las cuales suenan cada hora en punto, por lo que podrás escucharlas durante tu visita. Todas las campanas son réplicas de las originales, ya que se destruyeron cuando la torre se desplomó en 1902.
Mientras estás en la torre, localiza la placa conmemorativa de un importante evento en la historia de la astronomía. Fue aquí donde Galileo Galilei mostró su telescopio al Dux de Venecia desde la torre, en 1609.
El campanario de San Marcos se encuentra en la plaza de San Marcos, cerca de la basílica. El campanario está abierto todos los días desde la mañana hasta la tarde, con horarios extendidos en julio y agosto. Se cobra una pequeña tarifa por subir a la torre y disfrutar de la vista.