El hotel había tenido un problema con la tarjeta de crédito y cuando llegamos al hotel; a las 12 de la noche con dos niñas pequeñas, nos encontramos que nos habían anulado la reserva. Nadie nos comunicó nada, el hotel porque no tenía nuestros datos y Expedia como intermediario tampoco:(. La reserva era de una habitación familiar y como no tenían a las 2:25 de la madrugada, con las niñas dormidas en los sillones de la recepción, nos dieron dos habitaciones dobles la primera a precio de familiar y la segunda a mitad de precio. Al día siguiente el hotel nos tenía preparada la habitación familiar, por lo que ninguna queja al respecto, eso sí, al final aparte del precio de la reserva tuvimos que pagar la mitad de esa habitación doble.
La habitación bien, camas muy cómodas, el baño se sale el agua al ducharse y esta un poco deteriorado por la humedad por lo que deberían arreglarlo.
El desayuno variado y de calidad. Muy bien comunicado con metro y tren. Personal de recepción amable. Recomendado totalmente para familias. Cerca del hotel se puede comer barato y bien, al lado del canal la pizzeria POMMresto hace unas pizzas buenísimas.