Ubicación inmejorable, zona tranquila y segura, cerca de dos estaciones de metro, en medio de los sitios emblemáticos de la ciudad a los cuales se puedebllegar caminando. Habitación de buen espacio comparada con otros hoteles, cama cómoda y amplia, al igual que la ducha y le realizaban limpieza diaria. Personal amable y algunos hablan español o inglés. El desayuno cuenta con variedad de productos incliyendo frutas (cuesta 14 euros y no está incluido)