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La casa no es muy amplia pero está muy bien mantenida. Baño y cocina de dimensiones reducidas pero reformados recientemente, limpios y cómodos. Mobiliario sencillo pero suficiente. Camas muy cómodas. El exterior tiene mucho encanto, con un amplísimo jardín rodeado de campos de limoneros, con mucho espacio para que jueguen los niños. Tranquilidad total. Muy bien situada junto a la autopista para visitar todos los lugares de interés en el sureste de Sicilia. A 5 minutos también de hermosas playas en la Reserva Natural dei Vendicari.
El propietario, Sebastiano, es un hombre muy agradable que está muy pendiente de todo lo necesario y nos atendió perfectamente. En resumen, un lugar muy recomendable