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El lugar está completamente abandonado, no hay nadie que te reciba y si tienes suerte abres a la primera con un código que te manda por whatsapp un tal Pedro, eso si tienes suerte y tienes internet, si no, no sé cómo se haría para entrar. El precio no es nada bajo para el mal servicio que ofrecen: las habitaciones estaban sucias, con ropa de cama sucia, se ve que no aspiran, los tapetes y el piso lleno de pelos de otros huéspedes y había un olor insoportable a cigarrillo, cuando se supone que son habitaciones de no fumar. Los baños, que son compartidos, uno no servía y el otro estaba lo que sigue de sucio. Nada agradable. Para la hora que llegamos era tarde y estábamos cansadas, de lo sucio no podíamos ni imaginar descansar ahí y por la hora no había manera de contactar a nadie, tuvimos que buscar otro hospedaje por nuestra cuenta que, obviamente por la premura, salió más caro. El "gerente del lugar" se limitó a llamarnos mentirosas y decir que la habitación estaba limpia.
Lucía Isabel
Se hospedó 2 noches en abril de 2025
