Desde una ciudad capital llena de encanto hasta sus pueblitos coloniales muy tranquilos, Argentina es verdaderamente un paraíso para el turista. El segundo país de mayor extensión de Sudamérica se destaca por su diversidad natural, que incluye las montañas con picos nevados de los Andes, magníficas cataratas, desiertos, extensos viñedos y lagos. Argentina se extiende a lo largo de 3,650 kilómetros (2,268 millas) desde la frontera con Bolivia hasta Tierra del Fuego.

Buenos Aires es el corazón vibrante de Argentina, una ciudad de ritmo rápido que combina influencias europeas con la pasión por el tango, la política, los cafés y la vida nocturna. Descubre las características diversas de sus coloridos barrios —como les llaman sus habitantes—, admira sus estilos arquitectónicos eclécticos, prueba un tradicional corte de carne argentino y aprende a bailar tango. Disfruta de un paseo en bote por los canales del Delta del Tigre o aprovecha para descubrir la cultura gaucha en San Antonio de Areco.

A medida que te alejas de Buenos Aires, el ritmo del país se vuelve más lento y los paisajes más naturales. En el Norte, podrás maravillarte con las majestuosas Cataratas del Iguazú y los cerros de múltiples colores que verás en la Quebrada de Humahuaca. Visita la ciudad cultural de Salta y sube a los Andes a bordo del Tren de las Nubes.

Prueba alguno de los famosos vinos argentinos en un tour por los viñedos y bodegas de Mendoza. Visita las playas de la Costa Atlántica, como Mar del Plata. Sigue la ruta al Sur, a los pies de los Andes, con destino a San Carlos de Bariloche, donde te esperan aventuras en el corazón del Distrito de los Lagos de Argentina.

La región sureña argentina de la Patagonia es un area natural, que se caracteriza por sus lagos, montañas y glaciares súper pintorescos. Aprovecha para ver a los pingüinos, en Punta Tombo, o a los delfines y las ballenas jorobadas, en Puerto Madryn, Península de Valdés. Deslúmbrate ante el descomunal Glaciar Perito Moreno, ubicado cerca de El Calafate. Prepárate para caminar y esquiar en Ushuaia, una de las ciudades más australes del mundo y punto de partida para conocer la Antártida.

Atravesar grandes distancias a lo largo de Argentina puede tomar tiempo. Sin embargo, viajar es fácil, gracias a la excelente red de autobuses y vuelos del país. Desde las temperaturas calurosas propias del verano en el Norte hasta las frías nevadas típicas del invierno en el Sur, Argentina tiene todos los climas y es un destino que podrás visitar en cualquier momento del año.