Si bien fue descubierta por Hollywood en los últimos años, esta bahía, digna de un cuento, sigue siendo uno de los paisajes naturales más bellos del sur de Tailandia.
Desde la furia del Kick boxing tailandés, o Muay Thai, hasta el pausado andar de los monjes en el templo Wat Pho, esta \"Ciudad de los ángeles\" equilibra a la perfección la algarabía y la tranquilidad.
Pattaya, un caleidoscopio de neón con una vida nocturna agitada, es la segunda ciudad más visitada de Tailandia. La ciudad ha atenuado su imagen y, por este motivo, cada vez más parejas y familias visitan sus playas.
Especialmente conocida por los habitantes locales y por quienes solían vivir en la región, esta aldea tranquila es, principalmente, subdesarrollada y conserva su encanto natural.
Si quieres pasar un día fuera de Bangkok, visita esta ciudad que alguna vez fue la capital de Tailandia y conoce su parque histórico, sus ruinas y estatuas gigantes.
Escala la cascada de siete niveles o desciende a las profundidades del complejo de cavernas en este parque boscoso al noroeste de la ciudad de Kanchanaburi.
En esta espectacular reserva costera, picos de montaña boscosos se levantan sobre playas de arena y manglares donde habitan muchas especies de aves inusuales.
Este archipiélago tailandés es conocido como uno de los mejores lugares para bucear del mundo y cuenta con una fantástica vida salvaje y excelentes opciones para disfrutar de aventuras al aire libre.
Si bien fue descubierta por Hollywood en los últimos años, esta bahía, digna de un cuento, sigue siendo uno de los paisajes naturales más bellos del sur de Tailandia.
Ko Samui es la clásica isla paradisiaca que sacan en las películas. Playas prístinas de arena blanca, agua azul transparente y una increíble vida nocturna.
Phuket ofrece un ambiente tropical para relajarse, cultura y mucha diversión. Da un paseo en elefante o aprovecha para tomar un safari. O bien, disfruta de una fiesta hasta al amanecer en Patong. Descubre las islas de la bahía de Phang Nga y explora el centro histórico de Phuket
Desde la furia del Kick boxing tailandés, o Muay Thai, hasta el pausado andar de los monjes en el templo Wat Pho, esta \"Ciudad de los ángeles\" equilibra a la perfección la algarabía y la tranquilidad.