Nos ha encantado la ubicación y la atención del personal de recepción. La habitación muy agradable y limpia, la cama cómoda, pero las almohadas bastante duras, acabamos con dolor de cuello ambos. La nota mala el desayuno, muy pequeño el salón, en cuanto estábamos más de cuatro adultos de pie no podíamos coger las cosas. Falta un buen café expreso y los panes para hacer tostada los 3 días estaban duros!!! Con lo que no pudimos hacernos tostadas de pan, también nos llamó la atención que no había aceite de oliva para el pan.
En general contentos, aunque creemos que deben mejorar el desayuno encarecidamente.