Considero este hotel tiene una muy buena vista al Lago Atitlan y los volcanes, muy limpio y amplio.
desde mi perspectiva es un hotel apropiado para familias de preferencia con niños por la piscina amplia que tiene y que todos permanecen concentrados allí. los alimentos muy buenos, únicamente me llamo la atención que a pesar de tener el personal necesario se tardan demasiado tiempo para servir los alimentos, al parecer cuando se les llena el restaurante.