La ubicación del hotel es lo mejor, puesto que andando cinco minutos estás en la playa.
En cuanto al hotel en sí, es muy antiguo, con una decoración y un baño años sesenta,por lo menos la habitación que nos tocó a nosotros; además era interior y daba a un patio de luces muy pequeño, con lo cual había poca luz, y daba un poco de sensación de agobio.
La limpieza es excelente, tanto en la habitación como en el baño.
El aire acondicionado funcionaba muy bien, y menos mal porque sino no se hubiera podido estar, ya que al abrir la ventana no corría ningún tipo de aire, y en los rellanos hacía un calor horroroso.
En cuanto al precio, me pareció caro para como es el hotel y la habitación en sí, aunque fuera un fin de semana en agosto, pues he estado en otros a lo largo del mes, más económicos teniendo más confort y prestaciones.
No obstante, para pocos días está bien, puesto que como ya he comentado, la habitación está bien sin grandes pretensiones,está en una zona muy agradable y céntrica, y el personal del hotel también es muy agradable