Excelente experiencia en el Fairmont. Buen servicio y muy buena comida, tanto en el restaurante Cañas como en el servicio en la alberca. Si que tengo algunas observaciones para mejorar. En primer término el mobiliario del armario luce viejo y la calidad del mismo no hace “match” con el resto de la experiencia en el hotel. Por otro lado, si bien, la limpieza de la habitación fue adecuada, se percibe en el ambiente micha humedad y de hecho la ropa que se guarda en el mismo, en un dia ya desprende el olor a humedad. Por último, comento que el gerente Marc que nos recibió el lunes 13 a la media noche no hizo gran esfuerzo por mostrarse amable. Fue muy parco y a pesar de que nosotros decidimos hablarle en español, lo cual es puede hacer bien, no dejo de respondernos en inglés. Es un tema de cortesía que siempre se agradece. Ahh y finalmente, no había ningún lugar donde comer en hotel a media noche, tampoco había room service. Eso es poco usual en los hoteles en los que nos solemos hospedar. Eso nos hizo buscar algo fuera del hotel, considerando que en l zona Isla verde no hay muchos lugares para comer abiertos a esa hora y además veníamos del aeropuerto de un viaje largo. Sugerimos considerar estas observaciones.