Hostal de costa para pasar justo una noche o dos máximo.
Bañera sucia de churretes negros, con olor a orín.
Desayuno bien, aunque poco previsores para abastecer a todo el mundo. Que se te acabe la mantequilla a las 9 de la mañana, y no poder ofrecer más, sabiendo que viene gente a desayunar lo encontré algo penoso