Hoteles históricos en Ponce

Una excelente opción es recorrer los sitios históricos durante tu estadía en Ponce. Puedes aprovechar tu viaje para conocer las famosas tiendas y las famosas playas. Unas vacaciones en esta zona romántica también pueden incluir sus museos.

En Ponce hay 90 opciones de hospedaje que puedes reservar en Expedia, aunque no muchos hoteles históricos.

Ponce goza de especial prestigio por contar con lugares tan atractivos como Parque de Bombas, Teatro La Perla y Museo Castillo Serrallés. Admira la riqueza cultural de la zona en lugares como Museo de Arte de Ponce, Museo de la Historia de Ponce y Museo de la Música de Puerto Rico. Otros sitios que valen la pena conocer son Plaza Las Delicias y Colina El Vigía.

Reservar en un hotel histórico te permite pasar unas noches en un edificio que cuenta con un reconocimiento nacional por su valor histórico. Un palacio, un castillo, una residencia o incluso una antigua estación de policía, un pub, una cabaña o un rascacielos pueden convertirse en hotel histórico, siempre que tengan una relevancia específica. La arquitectura tradicional o la decoración de época que suele apreciarse en los espacios compartidos o las habitaciones de este tipo de hoteles en Ponce es lo que les aporta un toque especial.

En algunas regiones, es más común el término “hotel patrimonial”, mientras que en otras se prefiere “hotel histórico”, aunque sus definiciones son similares. La arquitectura y el edificio son los aspectos destacados de los hoteles históricos. En el caso de los hoteles patrimoniales, lo más relevante es su valor cultural y también su lugar dentro de la comunidad.

En el interior del hotel encontrarás los servicios modernos y las medidas de seguridad que buscas, aunque se haga todo lo posible por conservar las tradiciones del lugar y las fachadas históricas. Los servicios de la hotelería moderna, como Smart TV, wifi y baños con todas las comodidades, también suelen estar disponibles en los hoteles históricos. Elegir un hotel histórico en Ponce no implica dormir en un lugar incómodo o anticuado.