El hotel boutique es una casa antigua remodelada con un súper gusto. El mobiliario, decoración , amenities, detalles en los baños y los difusores de ambiente están súper; pero todo se queda atrás con el servicio y atención del staff, desde Gerardo el manager pasando por el chef Frank que nos cocinó antojos especiales por la noche , además de Reyna, Roger, Giovanni, todos sin excepción son excelentes anfitriones.
Sin duda lo recomiendo , sin duda volvería a este hotel.