La primera noche tuve que dejar el coche en la calle, porque el aparcamiento estaba completo, y no controlan a los usuarios que acaparan hamacas en la piscina dejando la toalla, aún cuando no se encuentren allí. Obviando estos detalles, han sido dos días muy placenteros. El hotel está cerca de dos playas, a las que se puede ir andando por un paseo marítimo con increíbles vistas. No fui a la piscina del spa, pero si utilicé la sauna y el baño turco. Después de las 18.00 horas hacen un descuento del 50% Tanto el desayuno como la cena son muy variados, y los camareros están pendientes de tus solicitudes. Por último comentaré que la terraza es una maravilla... super amplia, con hamacas para tomar el sol. Y la cama me resultó muy cómoda. El baño necesitaría una renovación. Se ve ya muy antiguo.