Fuimos con mi esposa entre semana. La Posada es un espacio magnífico. Ubicado estrategicamente, se encuentra a cuatro cuadras del Puerto, dos del casco histórico y tres del centro. El entorno es placentero. Cuenta con pintorescas habitaciones, piscina, gimnasio y un acogedor living en la planta alta. El salón desayunador tiene vista al jardín y el servicio se ajusta satisfactoriamente con la clasificación de la hostería. Mención aparte, y dato no menor, es la calidez y eficiencia de su equipo de trabajo. Trato cordialísimo, virtud algo escasa en los tiempos que corren...Encontramos nuestro lugar en Colonia, y volveremos a vernos, ángeles de La Posada. Crucen el charco y vayan sin mas dudas!