El alojamiento es tal cual se describe, muy limpio, excelentemente equipado, muy cómodo, a un paso del centro y a la vez se llega caminando a la playa, muy buena calefacción (estuvimos a fines del invierno), muy luminoso. Mención aparte merece la calidad humana de su dueña (nos tocó la época del coronavirus) ocupándose y preocupándose en todo momento por sus huéspedes. Por atención, calidad y precio, para recomendar y repetir sin dudarlo.