Nos asignaron la habitación 014 (planta baja), justo a la entrada de la puerta del hotel y justo al lado del restaurante Colores de Zahara. No había quien pudiera descansar al mediodía, ni por la noche. Imposible hacerlo al mediodía desde las 14 a 18 pm, ni por la noche hasta las 1,30 o 2 am.
No suelo opinar sobre mis estancias en Hoteles, pero es inadmisible una habitación así, con ese nivel de ruido, por 105 euros la noche.