Elegimos el hotel pensando que tenía servicio de recogida en el aeropuerto y no sólo nos dieron mal la información, al final no nos fue prestado el servicio de recogida y tuvimos que pagar aparte.
A pesar de que era un día frío, el aire en la habitación estaba alto y no podía regularse, terminé enferma por eso.
El desayuno es delicioso y abundante, y las habitaciones son cómodas y bonitas.
Los ascensores huelen mal, pero el resto del hotel es muy lindo