Terrible.
Para empezar, el check in fue un poco incómodo porque parecía que les molestaba atenderme como corresponde: preguntar si la clave del wifi que te acaban de decir (nada complicado, el primer apellido del huésped) va con minúsculas o lleva alguna mayúscula, no debería molestar a la recepcionista, como sucedió.
Ya al check out, me doy cuenta de que me he dejado algo en la habitación pero por ir ya bastante cargado y que la recepcionista (sí, la misma que en el check in) estaba sola y no podía volver a acompañarme, le propongo que en la limpieza de la habitación, lo recojan y lo dejen en consigna que ya apareceré al día siguiente a por el bulyo en cuestión. Aparecentemente no hay nigún problema, el problema viene cuan do al día siguiente