Da un paseo por las calles de Venecia acompañado de un guía experimentado y observa las basílicas del siglo XV, la arquitectura de estilo renacentista y los callejones, que te permitirán conocer la vida diaria de la mayoría de los venecianos. Continúa tu paseo con una visita sin filas a los museos y los opulentos interiores del Palacio Ducal,

Dirígete a la Plaza de San Marcos para reunirte con el guía. Deja la concurrida plaza, pasa por los innumerables arcos de las Procuradurías y adéntrate en la red de pequeñas calles y puentes de los canales de Venecia. Visita brevemente el campanario blanco fuera de la iglesia de Santa María Formosa y pasea por la zona de Castello, donde podrás observar el imponente edificio de la iglesia de Santi Giovanni e Paolo.

Lentamente, regresa a la Plaza de San Marcos y desvíate un poco del camino para descubrir los lugares más recónditos de la ciudad. Ve hasta el Palacio Ducal, pasa de largo las interminables filas que hay afuera y accede directamente para conocer los apartamentos, los museos, los jardines y los pasillos internos del palacio. Pasa el resto del día escuchando las historias que te contará el guía acerca de los antiguos duques, o gobernantes, de Venecia, quienes vivían en esta residencia palaciega.

Cruza el Puente de los Suspiros, que se llama así porque los prisioneros condenados a muerte daban un vistazo final a Venecia desde ahí antes de su ejecución, y explora la antigua prisión. Notarás el contraste entre el austero aspecto de la prisión y los lujosos apartamentos revestidos en mármol donde se albergaba la realeza de Venecia. Antes de volver a salir, no te olvides de visitar las cautivadoras exposiciones que se ofrecen en el museo del establecimiento y observar en detalle la construcción del palacio.