Aquí es donde la aventura y la naturaleza coinciden con un viaje épico a través de un antiguo bosque secreto de Nueva Zelanda. ¡Te transportarás por el bosque en una serie de tirolesas, puentes giratorios y otras increíbles atracciones que no se encuentran en ningún otro lugar del mundo!
Te llevaremos a las tierras ancestrales de Tura Te Ngakau, un antiguo bosque llamado Okohiriki (reserva panorámica de Dansey Road). Es un bosque secreto escondido a solo 15 minutos del centro de Rotorua. Un lugar al que solo Rotorua Canopy Tours lleva a los huéspedes. El bosque es mágico con árboles de más de 1000 años.
En grupos pequeños de hasta 10 invitados, dos de nuestros increíbles, informados y atentos guías lo acompañarán para dar vida a nuestra historia. Te mantendrán a salvo, sonrientes y harán toda la seguridad y la rotura suave por ti. Nuestro objetivo es ofrecer la mejor experiencia a los visitantes de Nueva Zelanda y dejarles recuerdos para toda la vida.
Recorrerás la imponente pasarela de ratas y aprenderás sobre nuestro entorno hasta llegar a la puerta del puente de Parque Jurásico, un puente giratorio de 75 metros que te permitirá disfrutar del primero de muchos momentos «por encima del toldo». La mágica escalera de caracol emerge del bosque y te exporta al toldo, ¡despídete del suelo! Aquí, la primera tirolesa es la más pequeña, ¡una introducción a la increíble sensación de ligereza de volar!
¡En cada esquina hay algo nuevo y emocionante que esperar! Más adelante, atravesarás el acantilado volcánico de 15 000 años de antigüedad, correrás con alguien por la tirolesa tándem de 400 metros, flotarás muy por encima del suelo en otro puente giratorio y te encontrarás cara a cara con la escalera suspendida. En cada esquina hay algo nuevo, esta experiencia está llena de ingredientes que te sacarán de tu zona de confort de forma segura, te permitirán conectarte con las personas que te rodean y sumergirte en uno de los bosques nativos restaurados más antiguos de Nueva Zelanda.
Los paisajes y las vistas son impresionantes, tómate tu tiempo para disfrutar de ellos, respirar el aire fresco del bosque y no olvides tomar muchas fotos. Puedes traer teléfonos y cámaras pequeñas, ¡y hay muchos lugares para capturar un momento especial! Lo mejor es que una parte de su participación en esta experiencia contribuye al esfuerzo de conservación que ayuda a que este bosque recupere la salud. Con nuestro sistema de control de plagas, las aves están regresando, se pueden ver insectos, hongos, flores y bayas y, a medida que los huéspedes llegan, ¡la situación no hace más que mejorar!