Desde muertes en llamas hasta tumbas de agua: en este recorrido a pie por el cementerio de 1,5 millas, tejemos lo que sabemos de los pueblos que vivieron aquí durante milenios con historias verificables de los últimos siglos. Solo podemos adivinar, en base a las lecturas de nuestros psíquicos y las extrañas coincidencias que hemos observado, donde la gente aquí antes que nosotros temía caminar y andar en canoa por la noche.

Como escribió un sabio, toda historia termina como una historia de fantasmas. Nuestros fantasmas son legión.

Ahora lo llamamos Oregón; “ourigan” fue el hogar ancestral de cientos de miles. Han dejado una oscuridad aquí, expresada con historias desde los primeros días de nuestra historia escrita hasta los tiempos modernos.

Comenzando con los primeros desastres, contaremos historias de fantasmas que hemos recopilado, desde muertes en llamas hasta muertes en las aguas del río cercano; desde las muertes autoinfligidas hasta las provocadas por el Estado o la culpa de un rico. Nuestra ruta nos lleva a través del lado este interior, donde han ocurrido más desastres en Portland que en cualquier otra parte de la ciudad y donde están enterrados muchos de los primeros colonos.