Al salir el sol de la mañana sobre Bodrum, emprenderás un recorrido panorámico hacia Éfeso. Las sinuosas carreteras ofrecen impresionantes vistas de la campiña turca, creando un preludio perfecto para las maravillas que le esperan. El viaje en sí dura aproximadamente 2,5 horas, lo que permite disfrutar de la belleza natural de la región.
(entrada no incluida)
Al llegar a Éfeso, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, no podrá evitar quedar asombrado por la enorme magnitud de sus antiguas ruinas. Al pisar las calles de mármol, retrocederá en el tiempo a una época en la que Éfeso era un bullicioso centro de comercio y cultura. Desde Cleopatra hasta julio César, esta ciudad alguna vez fue frecuentada por algunas de las figuras más influyentes de la historia.
Su primera parada es la extraordinaria biblioteca de Celso, una obra maestra arquitectónica que es un testimonio de la brillantez de los antiguos romanos. La fachada intrincadamente tallada, adornada con estatuas y relieves, es un espectáculo digno de contemplar. Mientras caminas por las imponentes columnas, casi puedes sentir los ecos de los estudiosos y filósofos que alguna vez se reunieron aquí.
El Gran Teatro, otro punto culminante de Éfeso, espera su exploración. Este colosal anfiteatro, con una capacidad de más de 25 000 espectadores, acogió espectáculos extravagantes y concursos de gladiadores. De pie en el centro del escenario, puedes imaginarte el rugido de la multitud y la energía vibrante que alguna vez llenó el aire.
Después de sumergirse en la grandeza del sitio arqueológico principal, tendrá la oportunidad de visitar las Terrace Houses. También conocidas como las Casas de los Ricos, estas viviendas intrincadamente conservadas ofrecen una visión poco común del opulento estilo de vida de los ciudadanos adinerados de Éfeso. Maravíllate con los vibrantes frescos, los intrincados mosaicos y los detalles arquitectónicos bien conservados que te transportan a la vida de la antigua élite.
(entrada no incluida)
Cuando se te haya abierto el apetito, es hora de disfrutar de un delicioso almuerzo turco en un restaurante local. Deléitese con una variedad de platos tradicionales, deleitando su paladar con los ricos sabores y especias aromáticas por los que la cocina turca es famosa. Aproveche esta oportunidad para descansar, relajarse y reflexionar sobre las extraordinarias vistas que ha presenciado hasta ahora.
Ninguna visita a Éfeso estaría completa sin una parada en el Templo de Artemisa, una de las Siete Maravillas del Mundo Antiguo. Si bien hoy solo quedan unas pocas columnas, su importancia histórica es palpable. Este venerado templo alguna vez fue un símbolo de Artemisa, la diosa griega de la caza, la fertilidad y la luna.
Para concluir su enriquecedor día, visite la Casa de la Virgen María, un tranquilo lugar de peregrinación en el monte Koressos. Se cree que es la residencia final de María, este modesto pero elegante santuario ofrece una profunda sensación de paz. (entrada no incluida)
A medida que se acerque, se verá envuelto en una atmósfera contemplativa perfecta para la reflexión y la oración, que proporcionará un final conmovedor a su viaje por Éfeso.