Un mirador único. Desde lo alto de la terraza panorámica, sus ojos recorren todo París. La Antigüedad revisitada. El arquitecto Jean-François Chalgrin se inspiró en el arco romano de Tito en un solo arco, pero fue más allá con dimensiones excepcionales (alrededor de 50 m de alto, 45 m de largo y 22 m de ancho) y columnas abandonadas. Un lugar clave de los grandes eventos nacionales. Querido por Napoleón en 1806, el Arco del Triunfo fue inaugurado en 1836 por el rey francés Luis Felipe, quien lo dedicó a los ejércitos de la Revolución y del Imperio. El Soldado Desconocido fue enterrado en la base del arco en 1921. La llama del recuerdo se reaviva todos los días a las 18:30.