El diseño es muy bonito y la villa que nos toco estaba comoda. Sin embargo, faltaba mantenimiento.La mesa del comedor sucia, las paredes sucias, la ventana del baño no se podia cerrar y no tenia sedazo (invadieron un par de zancudos) y no se podia poner llave por dentro a la puerta (puerta dañada).
Deberia de haber limpieza en las areas comunes de las encontramos vomito en el caminamiento que iba a nuestra villa, nadie lo limpio y paso alli todo el dia. Otras villas dejaban comida afuera y cuando amanecimos, varios perros comiendo las sobras y destruyendo bolsas con basura. Recepcion siempre deberia de haber alguien o bien, informar con quien se puede hablar para cualquier emergencia. no nos gusto que, como las sillas del restaurante son de tela y llovio, se mojaron entocnes toco comer desayunos y cenas sobre sillas mojadas y uno ya cambiado de ropa (sobre todo en la cena). El desayuno deberia de empezar a servirse mínimo a las 7.30 pero empieza hasta las 8.15 (muy tarde).
El personal fue amable pero parecia que no tenian organizacion, como que faltaba un lider que los dirigiera. Se les veia desde las 6.30 en las intalaciones pero en grupos platicando o sentados y empezaban hasta las 8. Es mejor aprovechar ese tiempo para que al despertar el cliente, ya este todo nitido.
Nos gusto la comida. El menu estaba rico y la chef muy amable. La señorita ericka (una jovencita ella) muy chispuda mesera; la que salvaba el servicio. 100pts que tengan cena tradicional