Visita los valles boscosos, los parques nacionales, los grandes bosques, los valles fluviales y los cañones de Serbia, y admira sus paisajes naturales vírgenes. Aprovecha también sus centros urbanos, con museos, galerías, fascinante arquitectura y divertida vida nocturna.
La capital, Belgrado, es una relajada ciudad con una gran variedad de atracciones. Disfruta de una imponente vista de la ciudad desde la Fortaleza de Belgrado en la Ciudad alta y Ciudad baja. A pocos metros de allí, visita la Catedral de San Sava de estilo serbio-bizantino y el Parque Kalemegdan. Recorre los numerosos museos y galerías de Belgrado. En el Museo Nikola Tesla, observa las demostraciones en vivo de algunas de las invenciones de científicos serbios. Contempla ropas tradicionales, artesanías y fotografías antiguas de rituales populares en el Museo Etnográfico. Por la noche, disfruta de un cocktail en Skadarlija, una zona de bohemias calles adoquinadas con galerías de arte, tiendas de antigüedades, cafés y restaurantes.
Viaja 90 kilómetros (55 mi) al noreste de Belgrado hasta llegar a Vrsac. Recorre las bodegas y los viñedos de esta ciudad con un antiguo legado vinícola. Serbia cuenta con diferentes regiones vinícolas, cada una de ellas con al menos una ruta del vino para realizar.
Admira las diversas atracciones naturales del país. Recorre los bosques, los desfiladeros y el valle del río Danubio en el Parque Nacional Djerdap. No te pierdas la Fortaleza de Golubac del siglo XIV. Visita los monasterios del Parque Nacional Fruska Gora y enfréntate a los desafíos al aire libre en el Parque Nacional Tara. Observa más de 200 especies de aves en la región de los humedales de Carska Bara. Durante el invierno, disfruta de las pistas de ski y las áreas de freeride en las cadenas montañosas de Kopaonik, ubicadas al sur del país. En el verano, nada en las cristalinas aguas del Borsko Jezero (Lago Bor). Cerca de la ciudad de Bor, podrás recorrer una parte de la Cueva de Zlotska en un tour guiado. Contempla las inusuales formaciones naturales y aprende sobre los hallazgos arqueológicos que se realizaron en este lugar.
Haz una parada en la ciudad de Nis para ver la Torre de las Calaveras, construida con restos humanos, y las ruinas romanas de Mediana, la ocasional residencia del emperador Constantino I.
El país es conocido por la arquitectura y las obras de arte de sus monasterios. Contempla las pinturas y las estructuras de mármol bizantinas del Monasterio Ortodoxo de Studenica del siglo XII, donde descansan los restos de los primeros reyes serbios. Admira los murales, los frescos y el hermoso paisaje boscoso de los alrededores.
Serbia es una excelente opción para disfrutar de la aventura y la cultura, y aprovechar para relajarte.