Este nuevo hotel en Mindo es espectacular. El bungalow en el que estuve es de ensueño, la cama es super comoda, David y el resto del personal son muy atentos y las vistas que tienen desde las terrazas hay que verlo, no se puede describir. Desayunar en esa terraza con esa vista y rodeado de colibries, momentos muy placenteros. Sin duda alguna, volveremos.