La ciudad tiene varios atractivos: el Museo Mauá, la Costanera, la Catedral, las casas de Matosas, la casa donde habitó Garibaldi, el teatro y la ex calera son algunos. El hotel, aunque aceptable, no se condice con las 4 estrellas que pretende: mi habitación era extremadamente pequeña, con poco espacio para guardar ropa y con demasiada luz por la mañana. Los puntos a favor del hotel son la amabilidad del personal y su ubicación estratégica. Mala relación calidad-precio.