Nos cambiaron 2 veces de habitación, la primera no tenía todo el equipamiento que ofertan, la segunda estaba INFESTADA de cucarachas la primera noche matamos cucharachas en la habitación y por la mañana los cajones de la cocina estaban llenos de cucarachas, de su excremento, los platos, cucharas, ollas, el lavatrastes, la pequeña despensa que llevamos, las leches de mis hijos, amanecieron con manchas de popo de cucarachas por lo que el personal amablemente nos ayudó a reubicarnos, la señorita de limpieza nos ayudo a asear con cloro nuestra mercancia, pero francamente deja un muy mal sabor de boca y es muy asqueroso. Al día siguiente a un lado de nuestra habitación quemaron basura como que no hubiera mañana, el departamento se llenó de humo, mi familia empezó con sus alergias .... es lamentable, es la cuarta vez que vamos y nunca nos habia ido tan mal. Seguro no volveremos. En relación a los alimentos del restaurante las papas a la francesa estaban picantes y mis hijos no pudieron consumirlas.