Ajaccio es la ciudad más grande de Córcega y la capital de esta isla francesa. Las calles llenas de árboles y las cafeterías junto al mar brindan una estupenda vista de la bahía. Disfruta del arte, la arquitectura y la historia de la ciudad. Toma una larga caminata por el campo y visita las islas deshabitadas de la costa.
En todas partes descubrirás detalles que recuerdan al hijo predilecto de la ciudad: Napoleón Bonaparte. El primer emperador de Francia nació en Ajaccio, en 1769. Los parques, plazas y avenidas están llenos de estatuas del líder militar y hay calles que llevan el nombre de la familia Bonaparte.
Visita la Plaza de Austerlitz para ver la Grotte Napoleón, una gran estatua de bronce sobre un basamento en forma de pirámide. El monumento está cerca de una cueva donde Bonaparte solía jugar durante su niñez. Visita la Maison Bonaparte, la casa donde nació Napoleón. Hoy en día, es un museo sobre la historia de su familia. Descubre más recuerdos de la familia Bonaparte en el edificio del ayuntamiento, situado en la Plaza del Mariscal Foch.
Camina por las calles estrechas del centro histórico, con sus casas, cafeterías, boutiques y bares cubiertos de tonos pastel. Visita el interior de la catedral del siglo XVI para ver la fuente de mármol donde Napoléon fue bautizado. Cerca de ahí se encuentra el Museo Fesch, un sitio ideal para admirar pinturas y esculturas del Renacimiento italiano.
Disfruta el sol, nada o practica algún deporte acuático en las playas y caletas de la ciudad. Toma un tour de buceo o un paseo en bote por las islas Sanguinarias, cuatro islotes deshabitados, situados a pocos kilómetros de la costa.
Ajaccio atrae a muchas personas que practican el senderismo. Recorre los distintos senderos que atraviesan la zona rural de Córcega, con vista al Golfo de Ajaccio. Camina por el Sendero de la Cordilleras, que comienza en el centro de la ciudad y se extiende a lo largo de la costa por casi 11 kilómetros.
Ajaccio es un puerto de ferrys y una terminal para los cruceros que navegan por el Mediterráneo. El aeropuerto de la ciudad cuenta con vuelos regulares a varias ciudades francesas y muchos otros destinos europeos. Puedes recorrer la ciudad en autobús, taxi o a pie, o si prefieres, renta un auto.
Con sus playas, museos y sitios históricos, encontrarás mucho que hacer en Ajaccio. Al igual que mucho otros visitantes, también puedes disfrutar de días completos en la zona rural.