Junior suite, con mi pareja, octubre 2014.
Amplia luminosa, cama King, aceptablemente cómoda. Mudada cada día. Decoración simple, pero no desagradable. Balcón y ventana a la calle. Las ventanas y contras son antiguas y se abrían con el viento durante la noche. Visillos muy sucios. Dos televisiones.
Baño con bañera hidromasaje y cabina de ducha, amplio y cómodo. Lavabo de un sólo seno, bidet. La ducha desaguaba muy muy mal, te duchaba con los pies encharcados y luego tardaba en vaciarse el plato una eternidad.
Desayuno muy mediocre, zumo horrible, no mucha variedad. Comedor, oscuro y feo. Escaso para todos los alojados, a veces hay que esperar.
Recepción e interiores más bien feos. Parking gratuito, hay que dejar llaves en recepción, posiblemente escasas plazas en temporada alta.
Acceso principal, por la calle lateral (es el mismo callejón del parking) y con escaleras que dificultan la movilidad de las maletas.
Personal muy agradable, tanto en recepción como en el comedor.